Emilio Pérez de Rozas pierde los papeles día sí y día también. Es mejor ir de payaso como Guasch (y al menos sabemos a qué atenernos) que ir de periodista decente y entendido y quedar como un loco que pierde las formas y hasta la razón. Creo que es el primera persona que consigue que la gente que opina lo mismo que él, le cueste decir que está con él. Es de coña.
por dios santo!!! digo una cosa, guash vale que no se calla ni debajo del agua, pero llega a ser gracioso. pero lo de perez de rozas es impresionante, este tio no tiene modales ni nada. sobre el tema en cuestion del k hablan, perez de rozas me parece a mi que mas k el debate contra raul como jugador, es contra raul como futbolista del madrid… lamentables este tio que no puede ser periodista, peor todavia que roncero por favor!!!
No sé si alguno lo escucháis, pero ya podrían escuchar «La Rosa de los Vientos» y aprender lo que es un debate intercambiando ideas, sin peleas, sin gritos, sin ese espectáculo tan lamentable, desafiando al oyente con el que no se está de acuerdo… en fin… menos mal que dejé hace tiempo de escuchar El larguero
Emilio Pérez de Rozas pierde los papeles día sí y día también. Es mejor ir de payaso como Guasch (y al menos sabemos a qué atenernos) que ir de periodista decente y entendido y quedar como un loco que pierde las formas y hasta la razón. Creo que es el primera persona que consigue que la gente que opina lo mismo que él, le cueste decir que está con él. Es de coña.
por dios santo!!! digo una cosa, guash vale que no se calla ni debajo del agua, pero llega a ser gracioso. pero lo de perez de rozas es impresionante, este tio no tiene modales ni nada. sobre el tema en cuestion del k hablan, perez de rozas me parece a mi que mas k el debate contra raul como jugador, es contra raul como futbolista del madrid… lamentables este tio que no puede ser periodista, peor todavia que roncero por favor!!!
No sé si alguno lo escucháis, pero ya podrían escuchar «La Rosa de los Vientos» y aprender lo que es un debate intercambiando ideas, sin peleas, sin gritos, sin ese espectáculo tan lamentable, desafiando al oyente con el que no se está de acuerdo… en fin… menos mal que dejé hace tiempo de escuchar El larguero