Escrito por Louis | 28 de mayo de 2016

Una rueda de prensa sin periodistas
Este viernes fue suspendida en Lezama la conferencia de prensa del entrenador del Athletic femenino, Joseba Agirre, en vísperas de un partido crucial contra el Atlético en la lucha por el título. Ningún periodista acudió, tal y como aireó el club a través de Twitter para escarnio de la profesión. El mensaje encontró un gran eco de inmediato, despertó muchos comentarios y fue retuiteado por cientos de usuarios. Las chicas del Athletic serían auténticas celebridades si todos los tuits sobre su equipo se compartieran con idéntico fervor.
Suspendida rueda de prensa de Joseba Agirre al no comparecer ningún medio a la misma. #futfem
— Athletic Club (@AthleticClub) 27 de mayo de 2016
El tuit originó las lecturas esperadas: «Los periodistas no han ido porque están todos en Milán»; «estarán más pendientes del corte de pelo de Cristiano Ronaldo»; «esto no interesa, qué vergüenza»… Cierto, pero demasiado simple.
A todas estas vestiduras rasgadas habría que añadirles un detalle: los medios de comunicación se desangran. Los ingresos menguan y las plantillas adelgazan. Las redacciones se vacían y no porque los periodistas estén en la calle buscándose la vida, sino en la calle a secas. Todo ello, mientras tres o cuatro gurús se hacen de oro y pregonan la edad de oro de la prensa deportiva.
Y los lectores, que se han acostumbrado a no pagar por nada (entre otras cosas, porque los medios no han sabido ofrecerles casi nada por lo que merezca la pena pagar), exigen no ya información completa y de calidad sobre los temas que les interesan, sino también sobre los que no. Porque hoy en día cualquier usuario puede no ya criticar a un medio sino hasta exigirle simplemente leyendo su Twitter; sin necesidad no ya de haberse dejado un solo céntimo sino de ser siquiera lector habitual de esa cabecera.
Los medios tienen la fea costumbre de mirar sólo a corto plazo, vuelcan todos sus esfuerzos en aquello que puede atraer grandes audiencias y desprecian por lo general el deporte minoritario. Me resulta increíble que en todo Bilbao no hubiera un solo reportero pendiente de lo que pudiera decir el entrenador del equipo líder en vísperas de un partido trascendental, pero no podemos quedarnos ahí. Tampoco se trata de culpar a los lectores por no hacer click en las declaraciones de Joseba Agirre, pero sí al menos preguntarles en calidad de qué exigen ellos a los medios (exceptuando los públicos) tal o cuál cobertura.
Bonus track: Antonio Villarreal: ‘Los lectores que nos merecemos‘
Falta de calidad conlleva desinterés. Los lectores que no pagan no son los únicos que se permiten criticar a quienes no financian, por cierto: todos estamos expuestos a la crítica mediática, pese a no interesarles hasta el momento de set noticia.
¿Qué es antes, el huevo o la gallina? Evidentemente, el huevo. La gallina no evoluciona en vida natural, sus propiedades vienen de las alteraciones genéticas que se producen en la «gestación» del huevo. Pues esto es lo mismo. No se puede culpar al consumidor de su consumo, cuando el producto ha tenido históricamente unas limitaciones evidentes.
En la sociedad actual se prima la inmediatez ante la calidad y los medios han sucumbido a ello. No por culpa del consumidor, porque también existimos en el otro espectro. Pero la apuesta ha sido la otra, porque es más rentable. No debido a que la otra no lo sea, sino porque lo es menos o no tan a corto plazo.
Y ahora los medios recogen sus frutos. Nada más. En la era de internet se abre la posibilidad a la especialización y si se sigue haciendo periodismo a brocha gorda pues pasan cosas como esta.
La rueda de prensa coincidía con la del Barakaldo, que se juega el ascenso a Segunda y los medios interpretan que si no entrena el primer equipo ir a Lezama no es rentable. En alguna de Ernesto Valverde un sábado por la tarde ha habido dos periodistas, al igual que en alguna de Ziganda no había más. Tal vez medios digitales especializados pueden cubrir mejor lo del trabajo de cantera, pero aquí la visión siglo XXI es de momento, no acreditarles.
No nos engañemos, hace mucho tiempo que existe el gran público que no suelta un euro por la música, las series, el cine, la prensa, pero quiere que los medios tengan todo, sean independientes.
Y aquí en Bizkaia lo único que interesa es el Athletic (el equipo masculino). He visto cerrar webs y páginas con resultados de fútbol de bronce o regional, revistas de pelota, retransmisiones radiofónicas que se hacían de baloncesto, los partidos de fútbol se hacen desde un estudio o un bar cuando se juegan fuera, he dejado de escuchar carruseles de partidos regionales.
La falta de apoyo la sufren también equipos de otros deportes minoritarios como fútbol sala, hockey o balonmano. Y muchos de estos ‘lectores’ que se quejan estoy convencido que ni pagan por ver esos equipos o ni siquiera se hacen socios.