Vanderlei Luxemburgo es en estos momentos una de las personas más felices del planeta. Su equipo, el Santos, acaba de apuntarse el campeonato paulista, mientras su ex equipo, el Real Madrid, prosigue su imparable proceso de desintegración deportiva e institucional. Doble motivo de celebración.
pfff, tanto que criticó sport, la labor de luxemburgo en el madrid y como lo ensalzan ahora….ummm como huele eso…